Luna Nueva en Leo en cuadratura con Lilith. La iluminación de nuestra Sombra

por ELARCADEASTROTRINA

La Luna Nueva está en el signo de Leo, este 2 de agosto del 2016, desde las 4:44 pm. Las primeras 8 horas son las más intensas en sus efectos. Posteriormente, sentiremos los efectos de su toque con la ‘Luna negra’ o Lilith.

Vivir identificados con un “yo” que sólo refleja una pequeña parte de lo que realmente somos, nos impide acceder a todo el gran potencial que cada uno de nosotros llevamos dentro, y por tanto, desarrollarnos de una manera más completa; pero no entrañaría mayor problema si no fuera porque todo el material recluido en nuestro inconsciente en forma de energías reprimidas, se nos cuela

constantemente y condiciona nuestros esquemas y comportamientos.

Cuando se habla de la sombra inconsciente, se suele hacer referencia sobre todo a la sombra negativa, es decir, al conjunto de impulsos, emociones, temores, sentimientos, experiencias, fantasías, etc., que nos vimos obligados a reprimir en su momento, pero que se han mantenido latentes y a menudo aparecen sin que podamos evitarlo, interfiriendo nuestro mundo consciente.

También se reconoce la existencia de una sombra positiva, que contiene aptitudes, talentos y potencialidades de crecimiento interior, que la persona se vio obligada a negar en su proceso de adaptación al entorno.

Pero la separación entre sombra positiva y negativa no deja de ser algo irreal. Por un lado, cada cultura, cada entorno, cada familia, tiene una visión particular de lo que son cualidades positivas o negativas, y por otro, todas las energías recluidas en la sombra inconsciente, forman parte del potencial de desarrollo que cada persona trae al mundo.

Lo que ocurre es que la represión a que se ven sometidas, provoca que muchas veces aparezcan distorsionadas. Por ejemplo, la agresividad está generalmente considerada como cualidad tabú, negativa, pero no deja de ser una desviación de la fuerza interior reprimida; es fruto de la debilidad, de la impotencia; sin embargo, la persona que ha sido capaz de reconocer e integrar esa fuerza interna, no es agresiva sino que actúa desde el dominio de la situación.

La Luna nueva se encuentra en cuadratura con Lilith, la Luna oscura, que ha sido definida también como el apogeo de la órbita lunar, o el punto de la órbita más alejado de la Tierra. Ambos puntos, el apogeo y el segundo punto focal, están en el eje mayor de la elipse orbital, la línea de ápside. Vistos desde la Tierra están en la misma dirección, y por lo tanto ocupan el mismo lugar en el Zodíaco.

La Luna oscura describe nuestra relación con lo absoluto, con el sacrificio como tal, y muestra cómo nos desapegamos. En tránsito, la Luna oscura indica alguna forma de castración o frustración, a menudo en las áreas del deseo, una incapacidad de la psique, o una inhibición general por lograr algo que sentimos nos pertenece. Es el momento que nos vemos en un espejo y descubrimos la sombra de nuestro inconsciente.

Te recomiendo durante esta semana, un pequeño ritual para elevar tu conciencia e iluminar tu sombra. Utiliza hoy para meditar las cartas del Tarot. Disponemos de 22 Arcanos Mayores y, cada arcano, es correspondido astrológicamente por un elemento, signo y planeta; pudiendo compartir entre ellos regentes principales y secundarios.

A continuación, estudiaremos la correspondencia de los arcanos a nivel astrológico, (en este caso quise colaborar haciendo referencia a una de mis fuentes predilectas, losarcanos.com), lo que nos facilitará más información sobre el mismo para descubrir tu sombra. Es importante conocer cada carta de acuerdo a su significado astrológico y sus cualidades principales.

ARIES – El Emperador:

Este arcano representa el poder, la decisión, la acción y la voluntad. Es un protector y un personaje riguroso, justo, que actúa con equidad, pero que en la posición inversa se vuelve inflexible, testarudo o viene a simbolizar la caída, la pérdida de bienes e ideales.

TAURO – El Sumo Sacerdote:

La carta del Papa representa el poder espiritual y el temporal, y reina en tres planos: obediencia al poder y la voluntad divina, respeto al orden, y la transmisión de las leyes universales al mundo. Significa que lo que pasa es lo que viene marcado por el destino. Su imagen es la figura de un hombre sentado en un trono con unas columnas detrás. Su tocado es una triple corona, que representa el poder anímico, espiritual y material.

GEMINIS – Los Amantes:

Los atributos positivos de este arcano, el número VI, es la toma de decisiones, mente superior, responsabilidad, honradez, matrimonio, fe, atracción; y por tanto los negativos son indecisión, frustración, irresponsabilidad, infidelidad, impulso sexual, hedonismo.

CANCER – El  Carro:

Este arcano representa lo que parece más obvio, el carro de la vida, el camino real que debemos hacer en la búsqueda de nuestra propia metamorfosis interior; la ruta por la que debemos transitar. En lo concreto este arcano es muy beneficioso en cualquier situación, presagia triunfo y control sobre los designios de la naturaleza.

LIBRA – La Justicia:

Este arcano representa la imagen fascinante de perfectas balanzas, sinónimo del equilibrio más profundo del centro. Solo con un máximo de concentración y con la cesación de todo movimiento es posible crear este estado de equilibrio para todas las cosas. La búsqueda de esta nivelación marca un camino a seguir, pero es la realidad lo que mueve al espíritu, nunca la razón o los sentimientos.

VIRGO – El Ermitaño:

Al tratarse de una persona refleja a alguien maduro, solitario, voluntariamente aislado, reflexivo, estudioso, no muy generoso. También podría definirse como una persona ambiciosa, que se ha trazado un plan, para conseguir sus fines y hace sola el camino para conseguir lo que quiere.

LEO –  La Fuerza:

Este arcano simboliza el impulso interior que mueve al espíritu; la confianza en la razón y el optimismo del que sabe que los Dioses lo protegen. Aquí el placer es más que mera fuerza vital, comprende tanto la pasión como la alegría, así como el gusto de experimentar el poder.

ESCORPIO – La Muerte:

Contrario a lo que el común de las personas piensa, la carta de La Muerte no es necesariamente negativa. Significa el final de todo lo que nos está limitando u oprimiendo, que nos impide seguir adelante y crecer, simboliza el comienzo de un nuevo camino.

SAGITARIO – La Templanza:

Este arcano representa el arte de la transformación en su expresión más depurada, en él se produce la unión de los opuestos, fuego y agua, luz y oscuridad, masculino y femenino. Esta unión es el proceso creativo de empezar algo nuevo y como tal sucede primero en el interior y luego se proyecta al mundo exterior.

CAPRICORNIO – El Diablo:

Es una de las más incomprendidas por todos los prejuicios que tenemos hacia este personaje, y por las supersticiones que le acompañan. Esta carta tiene que ver con las pasiones incontrolables, con lo que nos atrae sin poder evitarlo. Habla de alguien que se deja llevar por instintos terrenales.

ACUARIO – La Estrella:

Se trata de una de las cartas más positivas del Tarot. Es una carta con visión de futuro, habla sobre esperanza y claridad de visión. Algunos tarotistas antiguos la describen como La Azacana (Azacán/ Azacana), que como adjetivo significa que se ocupa en trabajos humildes y penosos. Es una carta que predice nuestro crecimiento espiritual interior.

PISCIS – La Luna:

De alguna manera, te guía hacia lo desconocido para ti, de tal forma que puedes permitir que entre en tu vida lo inusual. Representa, por otro lado, el reino subconsciente de la feminidad cambiante, increíble, seductora, sospechosa, húmeda y magnéticamente atractiva.

Medita por lo menos 5 minutos con cada una y escribe lo que se te venga a la mente sobre ti mismo, verás lo interesante que se vuelve el ejercicio cuando iluminas a tu sombra.